Estudios temáticos 2005 2004 2003 2002 2001 2000 Ficha técnica: Servicio para el crecimiento y la lucha contra la pobreza (SCLP) Ficha técnica: Cómo ayuda el FMI a los países pobres Ficha técnica: Alivio de la deuda en el marco de la Iniciativa para los países pobres muy endeudados (PPME) Ficha técnica: Documentos de estrategia de lucha contra la pobreza (DELP) Ficha técnica: El FMI y los Objetivos de Desarrollo del Milenio Lista de fichas técnicas Más información sobre el FMI en español |
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Desde hace algún tiempo, el FMI ha estado considerando adoptar una serie de medidas para satisfacer mejor las necesidades de los países miembros de bajo ingreso. La importancia de los esfuerzos del FMI fue destacada en un reciente examen de su estrategia a mediano plazo. La institución ha emprendido una exhaustiva reevaluación de su relación con los países de bajo ingreso, dirigida a lograr que sus servicios de crédito y asesoramiento respondan más estrechamente a las necesidades concretas de estos países y a definir mejor su vinculación con las autoridades nacionales, la sociedad civil y otros socios en el desarrollo. I. La función del fmi con respecto a los países miembros de bajo ingreso La reunión cumbre de las Naciones Unidas sobre la aplicación de la Declaración del Milenio, que tuvo lugar en septiembre de 2005, atrajo la atención mundial hacia la necesidad de tomar medidas audaces para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). El Fondo Monetario Internacional (FMI) es uno de los numerosos organismos —nacionales e internacionales— que trabajan de manera mancomunada para llevar a buen término los ODM. La principal contribución del FMI a esta labor es de promover la estabilidad macroeconómica y financiera, requisito crucial para la reducción de la pobreza y para el crecimiento económico. El FMI se ha abocado a un proceso de reflexión sobre la suficiencia y utilidad de los instrumentos que emplea en su relación con los miembros de bajo ingreso, proceso que está próximo a concluir. De ese proceso de revisión han surgido las siguientes propuestas:
Como parte de esta tarea de reflexión sobre su respaldo a los países de bajo ingreso, el FMI también está analizando su función dentro del proceso de la estrategia de reducción de la pobreza (ERP) y recientemente ha reevaluado el diseño de los programas respaldados por el SCLP. II. Evaluación del marco de la estrategia de reducción de la pobreza El FMI está trabajando en estrecha colaboración con otros socios en el desarrollo a efectos de garantizar que el marco de la estrategia de reducción de la pobreza constituya una herramienta eficaz para ampliar los esfuerzos que cada país realiza con el objeto de promover el crecimiento, reducir la pobreza y avanzar hacia los ODM. A fin de que este compromiso se traduzca en sus prácticas de trabajo y de ese modo su participación resulte más eficaz, el FMI está reevaluando su función dentro del proceso de la ERP y la articulación de esa función con los servicios financieros y otras formas de interacción con los países de bajo ingreso. Una prioridad clave es incorporar el proceso de la ERP dentro de los actuales procesos y sistemas de toma de decisiones, incluidos los correspondientes al presupuesto anual, y armonizar la ERP con los programas encuadrados en el mecanismo del SCLP, así como también con la labor señalizadora y de alivio de la deuda que se lleva a cabo con el respaldo del FMI. El examen de 2005 del mecanismo de la ERP —Equilibrio entre las responsabilidades e incremento de los resultados— reveló que dicho mecanismo ha contribuido a colocar la reducción de la pobreza en el centro del debate sobre las políticas públicas. La elaboración y aplicación de los DELP trajo aparejada una mejora de algunos indicadores socioeconómicos en los países de bajo ingreso, especialmente en África, un incremento del gasto social y una mejor gestión de los recursos públicos en un marco de mayor transparencia y responsabilidad, especialmente entre los países pobres muy endeudados (PPME). De cara al futuro, en la evaluación mencionada se observó que el mecanismo de la ERP podía y debía seguir siendo el marco operativo apropiado para ampliar los esfuerzos encaminados a alcanzar los ODM y para traducir la responsabilidad mutua de las autoridades nacionales y de los socios en el desarrollo en planes concretos al nivel de los países. Para el FMI es una prioridad ayudar a los países de bajo ingreso a manejar los efectos macroeconómicos de un incremento de la ayuda y a encarar las limitaciones, tanto en términos de de capital humano y físico como de orden institucional, que impiden un aprovechamiento eficaz del respaldo brindado por los donantes. El FMI intensificará su labor en el desarrollo de capacidades con el fin de ayudar a los países a integrar la ERP dentro de su respectivo proceso interno de toma de decisiones. III. El servicio para el crecimiento y la lucha contra la pobreza El servicio para el crecimiento y la lucha contra la pobreza (SCLP) sigue siendo el principal mecanismo con que cuenta el FMI para asistir a los países de bajo ingreso. La finalidad de este servicio establecido en septiembre de 1999 es hoy, como en ese momento, hacer que la reducción de la pobreza y el crecimiento ocupen un lugar más central en las operaciones crediticias que el FMI realiza con los países miembros más pobres. En cada caso el SCLP se estructura a partir de DELP integrales elaborados por los países. A fin de continuar prestando un respaldo eficaz a los esfuerzos que hacen los miembros de bajo ingreso para mejorar la estabilidad macroeconómica, lograr un crecimiento sostenible y reducir la pobreza, el FMI es consciente de que debe adaptarse a las nuevas y cambiantes necesidades de sus miembros. Recientemente el FMI concluyó una evaluación del diseño de los programas respaldados por el SCLP entre los miembros de bajo ingreso con economías más estables, o países en una etapa avanzada del proceso de estabilización. Se observó que, si bien muchos países de bajo ingreso aún deben realizar un considerable ajuste macroeconómico, muchos otros han logrado una amplia estabilidad macroeconómica y un crecimiento sostenido, a menudo con el respaldo del FMI. La evaluación mencionada confirmó la importancia de la estabilidad macroeconómica y de la apertura de la economía para lograr un crecimiento sostenido. Puso de relieve la función crucial de la inversión privada y de las exportaciones y además centró la atención en la importancia de la solidez de las instituciones. En ella también se analizó cómo crear un espacio fiscal para atender las necesidades urgentes en materia del gasto, aparte de lo que pueda lograrse mediante una mejor asignación de los recursos existentes. Una de las observaciones fundamentales se refiere a la importancia de una acertada coordinación de las políticas fiscal y monetaria para manejar una mayor afluencia de ayuda extranjera. En cuanto a la política monetaria, las conclusiones del estudio son favorables al establecimiento de metas de inflación de un dígito, pero dejando cierto margen para aplicar metas monetarias más flexibles que reflejen una mayor profundidad del mercado financiero. IV. Protección contra los shocks exógenos El Directorio del FMI ha aprobado en principio la creación de un nuevo servicio como parte de la Cuenta Fiduciaria del SCLP para los miembros de bajo ingreso que enfrentan shocks exógenos. Mediante este servicio se dará respaldo en condiciones concesionarias a los miembros de bajo ingreso que no cuenten con un acuerdo en el marco del SCLP. Este mecanismo servirá asimismo como una red de protección para los países que deseen dejar de participar en forma continua en programas del SCLP. Este servicio complementa los servicios disponibles en la actualidad para asistir a los países de bajo ingreso afectados por shocks, tales como un aumento del acceso al SCLP, el servicio de financiamiento compensatorio, la subvención de asistencia de emergencia a países en situación de posconflicto y para catástrofes naturales, el uso de recursos del tramo de crédito y el Mecanismo de Integración Comercial, en el caso de deficiencias de la balanza de pagos causadas por la liberalización del comercio multilateral. V. Apoyo a la política económica y función señalizadora El FMI ha estado trabajando en propuestas específicas acerca del apoyo a la política económica y la función señalizadora en los países de bajo ingreso y en un nuevo mecanismo no financiero, el Instrumento de Apoyo a la Política Económica (IAPE), que pronto entrará en funcionamiento. El Directorio resolvió crear este instrumento por considerar que los servicios normales disponibles para los países de bajo ingreso no permiten al FMI satisfacer plenamente la necesidad de dar apoyo, supervisar y avalar las políticas económicas de dichos países. El IAPE será una importante alternativa que se suma a la lista de servicios entre los cuales los países de bajo ingreso pueden escoger la forma de relación que deseen establecer con el FMI. El uso de este servicio sería totalmente voluntario para los miembros habilitados para acceder al SCLP que deseen que sus políticas reciban el aval del FMI, pero que no necesariamente desean o necesitan su asistencia financiera. Dichos países deberán contar con estrategias de reducción de la pobreza y marcos de política apropiados y eficaces. Además de servir de apoyo a los países en el diseño de sus políticas, el IAPE transmitiría una “señal” a los donantes, la comunidad empresarial y demás agentes acerca de la calidad de esas políticas. Para acceder al IAPE los países deberán diseñar políticas que cumplan con la condicionalidad de los tramos de crédito superiores. El Directorio del FMI llevará a cabo revisiones semestrales regulares de todo programa avalado por el IAPE. De ese modo, podrá hacer una evaluación multidimensional de las políticas y determinar si el programa, en su conjunto, se mantiene en el rumbo previsto. La publicación de los documentos relacionados con el IAPE será voluntaria, pero se presumirá la aprobación del país para publicarlos. VI. Necesidades de financiamiento del SCLP A fin de que el SCLP pueda responder adecuadamente a las necesidades futuras, se está trabajando para estimar las exigencias de financiamiento del SCLP a mediano plazo. Al efecto, se tomarán en cuenta las consecuencias del alivio de la deuda y la incorporación del IAPE y del mecanismo de financiamiento para casos de shock, así como las alternativas para incrementar la capacidad crediticia del SCLP. El Directorio del FMI ha hecho hincapié en la estrecha vinculación entre el financiamento de las operaciones de otorgamiento de préstamos concesionarios y un mayor alivio de la deuda y considera que la institución debe estar adecuadamente equipada para hacer frente a una futura demanda de financiamiento como parte del respaldo que brinda a los países de bajo ingreso. El Directorio ha destacado además el hecho de que el financiamiento adicional del mecanismo previsto para los casos de shock se obtendría de los donantes según se lo requiriera. VII. Alivio de la deuda y sostenibilidad de la deuda Se han logrado considerables progresos en la implementación de la Iniciativa reforzada para los PPME. En total, 18 países han alcanzado el punto de culminación y 10 se encuentran en la fase provisional. Asimismo, en la reciente evaluación de la iniciativa se elaboró una lista preliminar de otros 13 países habilitados. Dicha lista comprende aquellos países que quedaron habilitados luego de que el FMI y el Banco Mundial acordaran en 2004 prorrogar hasta 2006 la posibilidad de encuadramiento en la iniciativa y permitir así que más países se beneficiaran con el alivio de la deuda para los PPME. El Directorio del FMI ha analizado la propuesta del G-8 para otorgar más alivio de la deuda a los países pobres muy endeudados y está considerando las formas de ponerla en práctica, concentrándose principalmente en temas relativos al trato igualitario, la condicionalidad y el financiamiento. Existe consenso en cuanto a que mediante la propuesta se podría eliminar gran parte de la deuda externa de varios de los países más pobres del mundo, liberando así recursos para que avancen más rápidamente hacia el logro de los ODM. El Directorio ha destacado la importancia de proteger la situación económica y financiera del FMI y de no afectar su capacidad futura de otorgar préstamos a los miembros de bajo ingreso. En tal sentido, ha acogido con beneplácito el compromiso del G-8 de aportar recursos adicionales para satisfacer diversas necesidades. El personal técnico del FMI está analizando los detalles de la implementación de la propuesta. Dado que el Directorio no ha adoptado aún una decisión sobre el modo de implementar la propuesta del G-8, el FMI seguirá actuando en el marco de las políticas y los procedimientos actualmente vigentes hasta que las mayorías necesarias resuelvan cambiar o modificar dichas políticas. Para preservar los beneficios que el alivio de la deuda traería a más largo plazo, especialmente en vista de las permanentes necesidades de financiamiento de muchos países de bajo ingreso, seguirá siendo crucial ayudar a los países a evitar un endeudamiento excesivo. Esta es la finalidad del nuevo marco de sostenibilidad de la deuda para los países de bajo ingreso ya adoptado en 2005 por los directorios del FMI y del Banco Mundial. Dicho marco tiene por objeto ayudar a los países de bajo ingreso a evitar una excesiva acumulación de deuda mientras avanzan hacia la concreción de los ODM. IMF EXTERNAL RELATIONS DEPARTMENT
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