Comunicado de prensa No. 24/489

El Directorio Ejecutivo del FMI Concluye la Primera Revisión del Servicio Ampliado del Fondo y la Consulta del Artículo IV Correspondiente a 2024 para Ecuador

19 de diciembre de 2024

• El Directorio Ejecutivo del FMI completó la primera revisión del acuerdo de 48 meses en el marco del Servicio Ampliado del Fondo (SAF, EFF en inglés) para Ecuador, lo cual hace posible un desembolso inmediato de DEG 375,9 millones (aproximadamente US$500 millones). El Directorio Ejecutivo del FMI también concluyó la Consulta del Artículo IV correspondiente a 2024.
• Ecuador ha logrado avances significativos en la implementación de su programa de reformas económicas, cumpliendo todas las metas cuantitativas e indicativas establecidas para fin de agosto de 2024 para la primera revisión del acuerdo SAF y avanzando en la implementación de reformas estructurales importantes.
• Los firmes y decisivos esfuerzos de las autoridades en materia de políticas económicas ayudaron a salvaguardar la estabilidad macroeconómica, fortalecer las posiciones fiscal y externa, y proteger a los grupos vulnerables en medio de una coyuntura compleja.

Washington, DC – 19 de diciembre de 2024: El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) completó el día de hoy la primera revisión del acuerdo del Servicio Ampliado del Fondo (SAF) para Ecuador y concluyó la Consulta del Artículo IV correspondiente a 2024.[1] La conclusión de la primera revisión permite a las autoridades acceder de inmediato a un monto en derechos especiales de giro (DEG) de 375,9 millones (aproximadamente US$500 millones), con lo cual los desembolsos totales en el marco de este acuerdo ascienden a DEG 1.128,8 millones (aproximadamente US$1.500 millones).

El acuerdo SAF de 48 meses de Ecuador fue aprobado por el Directorio Ejecutivo del FMI el 31 de mayo de 2024 (véase el Comunicado de Prensa No. 24/197), con un acceso equivalente a DEG 3.000 millones (aproximadamente US$4.000 millones o 430 por ciento de la cuota de Ecuador). El programa apunta a respaldar las políticas económicas de Ecuador para afianzar la sostenibilidad fiscal y de la deuda, proteger a los grupos vulnerables, reconstruir las reservas de liquidez, salvaguardar la estabilidad macroeconómica y financiera, e impulsar el plan de reformas estructurales para sentar las bases para un crecimiento sostenible, inclusivo y más robusto que beneficie a todos los ecuatorianos.

El desempeño del programa ha sido sólido. Se han cumplido todas las metas cuantitativas e indicativas para la primera revisión del acuerdo del SAF, y las autoridades han avanzado considerablemente en la ejecución de su amplio programa de reformas estructurales respaldado por el programa.

Este notable desempeño ocurrió en un contexto macroeconómico difícil. La crisis de seguridad se vio agravada por una sequía histórica que desencadenó una crisis eléctrica que afectó negativamente a la actividad económica. Se proyecta que el PIB real se contraiga 0,4 por ciento en 2024 y que se recupere en 1,6 por ciento en 2025, con una inflación que permanecerá en un nivel bajo de alrededor de 2 por ciento.

En las discusiones de la Consulta del Artículo IV se examinaron estrategias para fortalecer la sostenibilidad fiscal salvaguardando al mismo tiempo el gasto prioritario social y en inversión. Es fundamental mejorar la supervisión del sector financiero. Además, en las discusiones se hizo énfasis en la necesidad de promover un crecimiento más fuerte e inclusivo, entre otros aspectos mejorando la situación de seguridad, fomentando la integridad financiera y la buena gobernanza, aumentando las oportunidades de empleo para mujeres y jóvenes, e impulsando la competitividad. Adicionalmente, adoptar medidas para reducir las vulnerabilidades al cambio climático ayudaría a mejorar la resiliencia macroeconómica.

Al término de la discusión del Directorio Ejecutivo de hoy, Gita Gopinath, Primera Subdirectora Gerente y Presidenta Interina, realizó la siguiente declaración:

“Las autoridades ecuatorianas han logrado avances significativos en la implementación de su programa de reformas económicas respaldado por el acuerdo en el marco del Servicio Ampliado del FMI (SAF). Pese a los nuevos desafíos derivados de una severa crisis de electricidad, las autoridades emprendieron una serie de medidas de política y reformas decisivas para restaurar la estabilidad macroeconómica y a la vez proteger a los grupos vulnerables. Se han cumplido todas las metas cuantitativas para la primera revisión del acuerdo del SAF y la implementación de las metas estructurales avanza a buen ritmo.

“Las autoridades se mantienen comprometidas con su plan de consolidación fiscal, que ayudará a afianzar la sostenibilidad fiscal de Ecuador y a mantener la deuda pública en una trayectoria descendente consistente con la meta de deuda. El plan contempla esfuerzos equilibrados por el lado de los ingresos y los gastos. Estos esfuerzos incluyen la movilización de ingresos no petroleros mediante medidas permanentes y la reducción de la dependencia del sector petrolero, mientras se contiene el gasto corriente y se protegen gastos sociales y de inversión esenciales.

“Las autoridades continúan trabajando para reforzar la red de protección social, incrementando la cobertura del registro social y ampliando gradualmente los programas de transferencias monetarias. Esto contribuirá a aumentar el apoyo gubernamental a los más vulnerables y a mitigar el impacto de la consolidación fiscal en dichos grupos.

“La agenda de políticas financieras incluye pasos para afianzar los marcos de supervisión y resolución del sector financiero, incrementar la coordinación entre supervisores financieros, promover el desarrollo del mercado de capitales, y reforzar la red de seguridad financiera, en línea con las recomendaciones de la Evaluación de la Estabilidad del Sector Financiero del FMI para Ecuador de 2023.

“Las autoridades se mantienen comprometidas a implementar su plan de reformas estructurales. Están tomando medidas para mejorar la gobernanza y la transparencia, combatir la criminalidad, reforzar la integridad financiera, fortalecer la gestión de las finanzas públicas, facilitar la participación laboral de mujeres y jóvenes, y promover un crecimiento fuerte e inclusivo. Además, las autoridades están comprometidas a avanzar en la implementación de la agenda de políticas climáticas para afianzar la resiliencia macroeconómica, lo que incluye adoptar medidas para reducir la vulnerabilidad al cambio climático, diversificar las fuentes de energía, y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.”

Evaluación del Directorio Ejecutivo[2]

Los Directores Ejecutivos elogiaron la ejecución sólida del programa por parte de las autoridades y la implementación de reformas en el marco del acuerdo del Servicio Ampliado del Fondo (SAF), incluyendo la adopción de medidas de política decisivas para abordar los desequilibrios fiscal y externo y a la vez proteger a los grupos vulnerables. Los Directores destacaron en particular el desempeño sólido del programa a pesar del difícil entorno, exacerbado tanto por una grave crisis de electricidad provocada por una sequía histórica como por dificultades de seguridad, que en conjunto debilitaron la actividad económica. Dado que los riesgos para las perspectivas económicas siguen siendo elevados, los Directores instaron a las autoridades a seguir implementando su ambiciosa agenda de reformas a fin de salvaguardar la estabilidad macroeconómica y promover un crecimiento más fuerte e inclusivo.

Tomando nota del encomiable avance realizado por las autoridades, los Directores estuvieron de acuerdo en que es necesario continuar la consolidación fiscal en conformidad con el SAF para garantizar la sostenibilidad fiscal a mediano plazo. Los Directores acogieron con satisfacción el plan fiscal de las autoridades que combina medidas para movilizar ingresos tributarios permanentes de alta calidad y para racionalizar el gasto corriente, incluyendo la contención de la masa salarial pública. La aplicación gradual de estas medidas, junto con una comunicación cuidadosa, será importante para obtener el respaldo público. Los Directores elogiaron los continuos esfuerzos de las autoridades por ampliar los programas de asistencia social destinados a los más vulnerables.

Los Directores resaltaron las medidas adoptadas por las autoridades para alinear los precios domésticos de la gasolina con los precios internacionales, junto con un mecanismo de compensación social. Esto ayudará a reducir la dependencia de los volátiles ingresos petroleros y a abordar vulnerabilidades fiscales estructurales de larga data, creando al mismo tiempo espacio para gastos sociales y de inversión cruciales, especialmente en educación, salud, seguridad y energía.

Los Directores señalaron que el sector financiero es en general estable, pero que la solidez financiera de algunos bancos pequeños y cooperativas de crédito se ha deteriorado. Acogieron con satisfacción la mejora de la coordinación entre los supervisores financieros y los avances en las reformas del sector financiero, en consonancia con las recomendaciones del Programa de Evaluación del Sistema Financiero (FSAP, en inglés) de 2023. Instaron a las autoridades a monitorear atentamente y abordar instituciones débiles, fortalecer los marcos de supervisión y resolución del sector financiero, y eliminar gradualmente la tolerancia regulatoria a un ritmo adecuado.

Los Directores recalcaron la importancia de seguir avanzando la agenda de reformas estructurales, incluyendo para mejorar la transparencia y la gobernanza (incluyendo en las empresas públicas), fomentar la inversión privada, fortalecer la gestión de las finanzas públicas, reforzar el marco de lucha contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo (AML/CFT en inglés), facilitar la participación laboral de mujeres y jóvenes, y aumentar la resiliencia ante el cambio climático.

Los Directores enfatizaron que los riesgos para el programa siguen siendo significativos, incluyendo debido a los desafíos energéticos y de seguridad, incertidumbres electorales, y una prima de riesgo soberana elevada. El firme compromiso con el programa y su implementación seguirá siendo crucial para el éxito y la recuperación del acceso a los mercados internacionales cuando las condiciones lo permitan. Los Directores recalcaron la importancia de seguir supervisando estrechamente el programa, la planificación para contingencias, el apoyo para el fortalecimiento de las capacidades, y el financiamiento externo oportuno y adecuado. Los Directores instaron al personal técnico a mantener una estrecha interacción con las partes interesadas en el contexto de las próximas elecciones, a fin de salvaguardar los objetivos del programa.

[1] Conforme al Artículo IV de su Convenio Constitutivo, el FMI mantiene conversaciones bilaterales con sus miembros, habitualmente todos los años. Un equipo de funcionarios del FMI visita el país, recaba información económica y financiera, y analiza con las autoridades la evolución del país y sus políticas en materia económica. Tras regresar a la sede del FMI, los funcionarios elaboran un informe que sirve de base para el análisis del Directorio Ejecutivo.

[2] Al concluir las discusiones, la Directora Gerente, como Presidenta del Directorio, resume las opiniones de los Directores Ejecutivos, y el resumen se comunica a las autoridades del país. Una explicación de los calificativos utilizados en los resúmenes se puede encontrar aquí: http://www.IMF.org/external/np/sec/misc/qualifiers.htm.