Boletín del FMI : Repercusiones mundiales del abaratamiento del petróleo
14 de julio de 2015
- La caída del precio del petróleo estuvo impulsada por la oferta más que por la demanda
- Los precios probablemente se mantendrán bajos
- El efecto neto en el crecimiento mundial es positivo
Si bien la caída de los precios del petróleo puede generar importantes pérdidas de ingresos para algunos países exportadores de petróleo, es probable que los consumidores paguen menos por el combustible y tengan más dinero para gastar. Aasim Husain, del FMI, señala que el aumento del gasto de consumo beneficiará al crecimiento mundial.
PRECIOS DEL CRUDO
Según un nuevo informe publicado por el personal técnico del FMI, un aumento del gasto de consumo tendrá, en definitiva, efectos positivos para el crecimiento mundial.
En una entrevista con el Boletín del FMI, Aasim Husain, coautor y Director Adjunto en el Departamento del Oriente Medio y Asia Central, examina el impacto de la caída de los precios del petróleo en la economía mundial.
Boletín del FMI: ¿Se ha trasladado la caída de los precios del petróleo a la población en general? ¿Están sintiendo los hogares todos los efectos del abaratamiento del petróleo, y cuál es su impacto en la economía?
Husain: La disminución de los precios del petróleo sin duda está beneficiando a los consumidores, pero no tanto como pensábamos. Aunque entre junio y el final del año pasado los precios del crudo se redujeron en alrededor de un 50%, a nivel mundial los precios minoristas del combustible se han reducido, en promedio, en la mitad, es decir, en aproximadamente un 25%.
La caída de los precios minoristas ha variado mucho según el país y la región del mundo. Y ello se debe a que en muchos países los precios minoristas están regulados y, de hecho, en muchos casos, son fijos. Por lo tanto, no varían cuando varían los precios mundiales del petróleo. Por ejemplo, en Europa el efecto de traspaso, es decir como solemos llamar al grado en que los precios minoristas del petróleo varían en respuesta a las variaciones de los precios internacionales del petróleo crudo, ha sido en promedio de alrededor del 80%. En las Américas —en América del Norte y del Sur— y en Asia, fue de alrededor del 50%. Por lo tanto, cuanto mayor sea el efecto de traspaso, mayores serán los beneficios para el consumidor.
Lo que el consumidor haga con este beneficio, depende de lo que piense, según si le parece que la caída será permanente o temporal. Si le parece que será un episodio temporal, lo más probable es que no cambie mucho sus hábitos de gasto. Pero si considera que será permanente, entonces lo más probable es que gaste más en otras cosas porque, de hecho, tendrá más dinero.
Con respecto a la reacción del consumidor, otro factor importante son las condiciones iniciales en las que se encuentra, o su nivel de deuda. Por ejemplo, si un consumidor que está muy endeudado (en su tarjeta de crédito, en su hipoteca, etc.) ve que su ingreso aumenta inesperadamente, puede aprovechar este aumento para pagar algunas de sus deudas.
Boletín del FMI: ¿A qué se debe esta impresionante caída del petróleo en el último año? ¿Se trata realmente de un aumento repentino de la oferta, o más bien de un cambio en el mercado de consumo?
Husain: Se debe más a la oferta que a la demanda. En otras palabras, la revolución del petróleo de esquisto, la aparición de tecnologías más eficaces y la expansión de estas tecnologías, que permiten extraer petróleo de manera más barata que antes, ha sido realmente importante. Por lo tanto, ahora es más barato producir ese petróleo y, según nuestras estimaciones, este abaratamiento explica más de la mitad de la caída del precio del petróleo en el último año.
Otro factor ha sido la demanda, especialmente en el segundo semestre de 2014. En muchas regiones del mundo, los indicadores económicos mundiales eran mucho más débiles de lo que se esperaba y esto también tuvo un impacto en los precios del petróleo.
Estos dos aspectos tienen un impacto muy diferente en la actividad. En cuanto a los shocks que han afectado a la oferta, el descubrimiento de nuevas tecnologías y de nuevas fuentes de petróleo, como el esquisto, permanecerá para siempre. Pero del lado de la demanda, el debilitamiento observado en 2014 ya está comenzando en parte a desaparecer, y con el tiempo la situación sin duda mejorará.
Boletín del FMI: Si los precios del petróleo se mantienen bajos, ¿cómo podrán los países exportadores compensar esta pérdida de ingresos a largo plazo?
Husain: Los países productores de petróleo deben adaptarse a esta nueva realidad. Afortunadamente, muchos de ellos aprovecharon el boom petrolero de los últimos diez años para acumular sustanciales reservas. Por lo tanto, esto les da tiempo para adaptarse, y no tienen otra opción.
¿Qué pueden hacer? En primer lugar, gran parte de sus ingresos provienen de las industrias del petróleo o relacionadas con el petróleo. Deberían tratar de diversificar sus fuentes de ingreso. Muchos de ellos están considerando la aplicación de algún tipo de impuesto sobre la renta de las sociedades o sobre el valor agregado, dado que en muchos casos estos impuestos no existen o se aplican a niveles muy bajos.
Otra posibilidad sería el gasto. Muchos de estos países gastan enormemente, por ejemplo, en infraestructura; quizás haya margen de maniobra para efectuar recortes en este ámbito, especialmente a medida que se completan algunos proyectos. Pero existe otro ámbito muy interesante en el que muchos de ellos podrían ahorrar: los subsidios a la energía o la tarifación de la energía. Muchos países en todo el mundo, no solo los países productores de petróleo, subsidian la energía. Y, de hecho, los países no productores de petróleo subsidian la energía directamente puesto que venden a los consumidores productos petroleros a precios más bajos de lo que cuesta importarlos o producirlos. Esta diferencia corre a cargo del presupuesto del gobierno. Muchos países productores de petróleo, por otro lado, no venden productos petroleros por debajo del costo, sino a precios más bajos de los que obtendrían si vendieran el petróleo en los mercados internacionales. En algunos países, este costo de oportunidad es considerable, y la situación beneficia principalmente a los ricos quienes consumen más petróleo que los pobres.
Boletín del FMI: ¿Se concluye en su informe que en definitiva los efectos del abaratamiento del petróleo son positivos para la economía mundial?
Husain: Considero que la caída de los precios del petróleo tiene un efecto positivo en la economía mundial. Observamos que los efectos positivos que estábamos esperando están tardando más en llegar. Esto se debe en parte a que entretanto se han producido otros shocks que han tenido un efecto inverso. Pero también creo que se debe en parte a que el ahorro se utiliza para reducir el endeudamiento excesivo, tanto en los hogares como en las empresas. Los beneficios de la caída de los precios del petróleo podrían tardar en llegar, una vez se hayan reparado los balances, pero el proceso de reparación está avanzando más rápidamente de lo previsto gracias a los precios más bajos del petróleo.