Mientras el resto del mundo lidia con el envejecimiento demográfico, la población de África crece a pasos agigantados. Para 2030, la mitad de los aspirantes a la fuerza laboral en el mundo entero provendrá de África subsahariana, y eso requiere la creación de hasta 15 millones de puestos de trabajo cada año.
Como lo muestra el gráfico de la semana, se trata de un reto particularmente difícil en las economías frágiles, afectadas por conflictos y de ingreso bajo, que concentran casi el 80% de las necesidades anuales de creación de empleos en la región y, a la vez, son las que más problemas han tenido para satisfacerlas.
Sus tasas de fecundidad son elevadas y su población joven aún no ha tocado máximos. Níger, por ejemplo, tiene 26 millones de habitantes y un porcentaje de jóvenes que presuntamente no alcanzará su nivel máximo hasta 2058, lo cual significa que deberá crear 650.000 puestos de trabajo cada año durante los próximos 30 años. Por otra parte, la población joven ya ha alcanzado máximos en muchos países de ingreso mediano, como Botswana, Ghana, Namibia y Mauricio, que enfrentarán menos presión en este ámbito.
Para aprovechar las posibilidades que encierra el auge demográfico de África será necesario generar una enorme cantidad de empleos productivos y de calidad que ofrezcan un ingreso superior al de subsistencia, en puestos formales o en trabajos por cuenta propia.
Esta aspiración se enfrenta principalmente a tres retos, pero las autoridades disponen de las herramientas necesarias para superarlos.
- Transformar la trampa del empleo informal en un trampolín. Concretamente, es necesario estimular la productividad del sector informal mediante una formación bien adaptada a las necesidades del mercado, un acceso más amplio al financiamiento y políticas que promuevan la transición al empleo formal. Conviene crear programas laborales que ayuden a los jóvenes —y sobre todo a las jóvenes, que enfrentan más obstáculos— a incorporarse a la población activa, garantizándoles las herramientas necesarias para prosperar.
- Crear condiciones propicias para el crecimiento del empleo en sectores muy productivos, como la manufactura y los servicios modernos. Dadas las limitaciones de las finanzas públicas, los gobiernos pueden priorizar medidas que beneficien a múltiples sectores; entre ellas, fomentar la competencia en el mercado y realizar inversiones productivas en infraestructura. Deberían tratar con cautela las políticas industriales centradas en determinados sectores, ya que pueden resultar costosas, distorsivas y conducentes a la corrupción.
- Romper las barreras a la expansión de la empresa privada. Priorizar infraestructura importante como la electricidad, Internet, las carreteras y el transporte público asequible permitiría facilitar el flujo de bienes y servicios. Reducir la burocracia y la corrupción también contribuirá al crecimiento de las empresas. Es posible multiplicar el financiamiento atrayendo más inversión extranjera directa y desarrollando los mercados de capital locales. Por último, fortalecer el comercio y la integración regional puede ampliar los mercados.
Un mercado laboral floreciente en África subsahariana puede beneficiar mucho a la comunidad internacional, no solo a los países y pueblos de la región, ya que será un motor de crecimiento, consumo e inversión para la economía mundial. El fracaso podría exacerbar la pobreza y alimentar la inestabilidad y la migración, en tanto que el éxito puede despertar la prosperidad tanto en África como en el mundo entero. Las autoridades deben pujar por un cambio significativo que les abra el camino hacia un futuro laboral más próspero a millones de personas.
—Este blog está basado en una nota analítica publicada en la edición de octubre de 2024 de Perspectivas económicas: África subsahariana, The Clock is Ticking on Sub-Saharan Africa’s Urgent Job Creation Challenge, preparada por Wenjie Chen, Khushboo Khandelwal, Athene Laws, Faten Saliba, Can Sever y Luc Tucker, del Departamento de África del Fondo Monetario Internacional (FMI). Para más detalles, consulte la presentación de Athene Laws y Faten Saliba en un rincón analítico organizado durante las Reuniones Anuales de octubre de 2024.