En septiembre invitamos a nuestros lectores de Diálogo a fondo a participar en una conversación en línea con Alejandro Werner, Director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI.
Recibimos muchas preguntas a través de nuestro correo electrónico y Twitter y en octubre seleccionamos un primer grupo de preguntas.
En este blog, Alejandro Werner contesta el segundo grupo de preguntas enviadas por nuestros lectores como, por ejemplo, el papel del FMI en la región, las proyecciones del FMI de los precios de las materias primas, cómo está afectando la crisis económica de la zona euro a los países de Latinoamérica, y muchas más.
¡Diálogo a fondo agradece a todos sus lectores por participar en esta conversación con Alejandro Werner!
¿En qué aspectos y en qué medida está afectando la crisis económica de la zona euro a los países de Latinoamérica?
A pesar de los vínculos comerciales (América Latina en promedio destina un 15% de sus exportaciones a la zona euro, e importa un 12% del total de importaciones desde esa región) y financieros (debido a la presencia de bancos europeos), el impacto de la crisis europea—y en general de la crisis financiera mundial—en América Latina ha sido limitado.
¿Por qué? Por un lado, la rápida respuesta de política en economías avanzadas implicó bajas tasas de interés y abundante liquidez internacional, lo cual facilitó el acceso al financiamiento externo de la región.
Al mismo tiempo, la región estaba mejor preparada que en el pasado para enfrentar shocks de esta naturaleza. La mayoría de los países tenían una posición fiscal suficientemente sólida como para implementar una respuesta contra-cíclica. La mayor flexibilidad cambiaria y una respuesta monetaria expansiva ayudaron a mitigar el impacto negativo. El endeudamiento externo limitado y una regulación y supervisión financiera más eficiente, también jugaron un rol importante.
Además, los bancos europeos en la región—principalmente españoles—operan con un modelo de subsidiarias con adecuada capitalización y rentabilidad y con financiamiento proveniente mayoritariamente de depósitos locales, lo cual limita la vulnerabilidad a shocks financieros externos. Finalmente, hubo algo de buena suerte, ya que los precios de las materias primas rebotaron rápidamente.
¿Cómo puede América Latina mejorar su desarrollo económico, si actualmente tiene una gran parte de la población en pobreza?
América Latina logró mejoras significativas en sus indicadores económicos y sociales en la última década. Los niveles de pobreza cayeron de un 45% en 2002 a algo menos del 30% en 2012. Es decir, cerca de 60 millones de personas lograron salir de la pobreza durante este período. El desafío para la región en los próximos años es consolidar estas mejoras así como también reducir la desigualdad del ingreso, que continúa siendo elevada a pesar de algunas mejoras recientes.
Para lograr estos objetivos es indispensable mantener un crecimiento económico saludable con estabilidad macroeconómica y financiera. Evitar crisis económicas como las que afectaron a la región en el pasado es sin duda un factor clave para evitar que se reviertan los logros sociales obtenidos. Mejorar la calidad de la educación, en especial para los segmentos de la población más carenciados, es otro elemento fundamental. Por último, es importante fortalecer los programas sociales de transferencia condicionada que estén bien focalizados en los grupos más vulnerables.
¿Qué tan efectivas son las políticas de supervisión del FMI?
La supervisión que ejerce el FMI incluye un diálogo continuo con las autoridades de sus países miembros sobre diversas áreas de política, en particular en lo que refiere a política cambiaria, monetaria, fiscal y financiera. Aunque es difícil determinar con precisión cuál es el impacto de cada una de las recomendaciones del FMI, nuestro análisis típicamente ayuda a destacar los riesgos que amenazan la estabilidad, y asesora sobre ajustes de las políticas económicas o financieras que resulten necesarios. En muchas ocasiones estas recomendaciones contribuyen a informar el debate interno y facilitan la tarea de aquellos argumentando a favor de implementar reformas.
Nuestra tarea de supervisión también tiene una dimensión mundial. En la economía globalizada de hoy, la cooperación internacional es fundamental. El FMI, con sus 188 países miembros, facilita la cooperación internacional a través del análisis de interconexiones, así como al fomentar que los países tengan en cuenta el efecto de sus propias políticas en otras economías. Al respecto, nuestro trabajo sobre los efectos de contagio de la política monetaria expansiva en países avanzados constituye un ejemplo reciente.
¿Cuáles son los países que tienen acuerdo con el FMI y han tenido éxito o mejora en su economía?
El FMI tiene programas con 38 países, 5 de los cuales están en América Latina y el Caribe. México y Colombia tienen actualmente Líneas de Crédito Flexible. Este instrumento precautorio, que supone un acceso amplio e inmediato a los recursos del FMI—y sin condicionalidad—en caso de necesidad, ha apuntalado la confianza del mercado durante tiempos de choques externos, resultando en una menor volatilidad cambiaria y menores diferenciales de tasas de interés que sus pares en mercados emergentes. Hasta el momento, ninguno de los dos países ha utilizado los recursos de la línea de crédito.
El Acuerdo de Derecho de Giro (Stand-By) con Saint Kitts y Nevis está ayudando en la importante reducción de deuda pública y en la recuperación de la actividad económica, mientras que en Haití la Línea de Crédito Ampliado ha ayudado a mantener la estabilidad económica desde el devastador terremoto que afectó al país. La Línea de Crédito Ampliado de Jamaica, que comenzó previamente este año, está colaborando en la reestructuración de deuda y consolidación fiscal que apunta a restaurar la sostenibilidad fiscal.
Entre los países que han completado sus programas en los años recientes, Costa Rica y Guatemala pudieron estabilizar sus economías y contener la caída resultante de la crisis financiera global; Nicaragua ha experimentado un repunte en su crecimiento, una reducción en sus coeficientes de deuda y un aumento en sus reservas internacionales; y Antigua y Barbuda ha progresado significativamente en reencauzar la sostenibilidad de su deuda y alcanzar estabilidad macroeconómica mediante la reestructuración de su deuda, un gran esfuerzo de consolidación fiscal y la implementación de importantes reformas estructurales.
¿Hasta cuándo puede preverse la vigencia de tasas de interés bajas en los mercados de capital? Esto se especialmente de interés para los países sobre endeudados.
Al igual que otras variables del mercado financiero, las tasas de interés de más largo plazo son difíciles de proyectar. Dicho esto, sin embargo, los rendimientos de los bonos se encuentran en niveles muy bajos en términos históricos en la mayoría de nuestros países. Como se discutió en nuestro más reciente informe de América Latina, esto significa que los gobiernos, deudores corporativos e inversores necesitan prepararse para un muy probable aumento en las tasas en algún momento, lo cual probablemente incluya condiciones de mercado volátiles como las que ya hemos visto durante el tercer trimestre de este año.
¿Cómo lidiar con mayores y más volátiles tasas de interés? El mejor seguro son hojas de balance sólidas. Para los gobiernos, esto incluye mantener los niveles de endeudamiento bajo control, manejar sus presupuestos prudentemente, y contener los riesgos de tasa de interés a través de la emisión de deuda con una madurez promedio suficientemente larga.
Afortunadamente, muchos gobiernos Latinoamericanos han mantenido sus hojas de balance públicas en bastante buen estado. Sin embargo, nuestro informe también remarca que los balances fiscales se han deteriorado en los últimos 5 años, por lo cual en todo caso sería mejor que los gobiernos se equivocasen por ser más precavidos, para estar así preparados para los desafíos que se avecinen.
¿Cuál es la perspectiva del FMI con respecto a la recuperación de los precios de las materias primas que exportan los países de Latinoamérica?
Como en el caso de las tasas de interés de más largo plazo, las proyecciones de precios de las materias primas están sujetas a una gran incertidumbre. En base a la información disponible al día de hoy, esperamos que los precios del petróleo, los metales y los alimentos permanezcan básicamente sin cambios o bajen levemente en el futuro. Si bien este no es un escenario particularmente negativo para los productores de materias primas de América Latina, implicaría una tendencia bastante menos favorable que la observada durante la década pasada, cuando los precios de las materias primas aumentaron casi continuamente.
Asimismo, los precios de las materias primas podrían bajar más fuertemente si, por ejemplo, el crecimiento de las economías emergentes, en particular China, se desacelerara más de lo previsto. Dado estas perspectivas y riesgos, los países de América Latina deben estar en guardia y asegurarse de no excederse en sus gastos en base a ingresos extraordinarios derivados de los precios de las materias primas. Como nuestro informe sobre la región plantea, esto apunta a una consolidación fiscal gradual, especialmente en países con altos niveles de deuda pública o limitada capacidad ociosa.
¿Cuál es su opinión respecto a la importancia que tiene el fortalecer los sectores de industria, manufactura y servicios para Colombia, con el fin de lograr ser un país más competitivo?
Después de haber logrado la estabilidad macroeconómica, el principal reto a mediano plazo de Colombia es promover un crecimiento fuerte, sostenible e inclusivo. Para tal fin, la mejora de la competitividad y el fortalecimiento de los sectores industriales, manufactureros y de servicios será clave. Algunas medidas adoptadas o en preparación son alentadoras y deberían contribuir a alcanzar esos objetivos. Una de ellas es la reducción de los costos laborales, producto de la reciente reforma tributaria. Los primeros resultados sugieren que ya está dando sus frutos, fomentando el empleo en el sector formal de la economía.
También será clave mejorar la infraestructura, especialmente carreteras, para reducir los costos no laborales. Una buena implementación de la cuarta generación de concesiones viales, que limite potenciales costos fiscales, será muy importante en este sentido. Por último, la aprobación de buenas reformas de salud y del sistema de pensiones también puede ayudar a mejorar la eficiencia y aumentar la competitividad.
¿Qué opina sobre el impacto del nuevo escenario económico a la radicación de inversiones en Paraguay? ¿Sería efectivo, considerando que este país atrae más bien inversión real antes que las de portafolio?
La administración del presidente Cartes está implementando una estrategia de desarrollo para aumentar el crecimiento económico potencial de Paraguay y reducir la pobreza en el mediano plazo. En este sentido, el gobierno está tomando las medidas adecuadas para fomentar la inversión privada y atraer la inversión extranjera directa mediante la modernización de la infraestructura del país, la mejora del ambiente de negocios y el fortalecimiento de la gestión del sector público, incluyendo la lucha contra la corrupción y la evasión fiscal. La ley de responsabilidad fiscal aprobada recientemente es una medida clave para fortalecer el marco de política macroeconómica y sostener un mayor crecimiento en el mediano plazo.